sábado, 2 de abril de 2016

¡Al son del pandero!

¡Al son del pandero! es una actividad dirigida a alumnos del segundo ciclo de educación infantil (4 años), y los objetivos que pretendemos alcanzar con el desarrollo de esta actividad son los siguientes:
  • Promover la utilización íntegra del espacio.
  • Favorecer el ritmo mediante la percusión.
  • Desarrollar la educación musical mediante el juego.
  • Promover la discriminación auditiva, localizando los sonidos y el silencio.
  • Potenciar habilidades motrices.
  • Promover las habilidades lógicas matemáticas.

Para realizar dicha actividad, necesitaríamos aros, que colocaríamos por el suelo, y un pandero. Para empezar, contaríamos a los niños la historia de que hay un lobo que toca el pandero y, mientras tanto, ellos tienen que ir andando o corriendo, al ritmo del pandero, por todo el espacio disponible. Pero que, cuando el lobo deja de tocar el pandero, deben correr hacia sus casas (que serán los aros) para evitar que éste los atrape.
Antes de empezar la actividad, veríamos si cada niño tiene un aro en el que meterse. Al principio se colocan menos aros que niños hay, para trabajar la lógica matemática con ellos y que, sean ellos los que cuenten cuántos niños quedan sin aros. Una vez hecho esto y puestos los aros que faltaban, explicaríamos que pueden situarse en el aro que quieran y que también pueden meterse en un aro con otro compañero. Así mismo, les diremos que a medida que el juego avanza, iremos quitando aros.

Para evaluar esta actividad, haremos otro juego llamado ¡Congelados! o ¡Estatuas!. Este juego consiste en poner música y, mientras la música suena, los niños se van moviendo por el espacio, pero cuando la música se para, todos tienen que quedarse como estatuas o congelados.


Experiencia

Esta semana una de nosotras ha llevado a cabo en las prácticas ambas actividades propuestas anteriormente.
Las dos actividades fueron todo un éxito y gustó tanto a los niños que, después en clase, estuvieron jugando ellos solos. Aunque hay que destacar que algún que otro niño no quería jugar a la actividad del lobo porque le daba miedo; pero a pesar de eso, participó en las actividades como el resto de sus compañeros. Debido a esto, consideramos que dicha actividad también sirve para que vayan perdiendo sus miedos.

Por eso, ¡os recomendamos que llevéis a la práctica dichas actividades!

No hay comentarios:

Publicar un comentario